Ahí va un navío
Med Int Méx. 2023; 39 (5): 840.
J Enrique Cruz Aranda
Ángel Romero Cárdenas
Ahí va un navío
Palabras y Plumas Editores. Ciudad de México 2022
No tenía el gusto de conocer al Dr. Ángel Romero, el primer acercamiento que tuve fue la breve biografía que se encuentra en la solapa del libro, en la cual destaca su ocupación y su familia; sin embargo, esta circunstancia me permitió abordar la lectura del libro de una manera más libre, sin prejuicios acerca de lo que me podía encontrar. Iniciando así la tarea de la lectura, veo el prólogo que nos ofrece una introducción clara y elegante acerca de lo que vamos a encontrar más adelante en el texto, las primeras palabras: “una emoción verbalizada” describen de manera muy clara e ilustrativa que el libro en general es un conjunto de emociones con forma de letras y palabras. El Dr. Romero nos presenta su obra de la siguiente manera: “Ahí va un navío cargado, cargado de … historias” y lo hace muy bien, lo que nos vamos a encontrar son historias, historias muy diversas, narradas de manera sencilla y clara. Continuando con la lectura, posterior a un prólogo que deja una excelente impresión y deseo de ya iniciar con los relatos; el primero de ellos, titulado “El tiro de gracia” no desmerece de lo hasta entonces relatado, es un texto de índole no médica, potente, ágil, que, además, cuenta con un final inesperado y reflexivo. No es sino hasta el sexto relato donde se presentan esbozos de la relación médica y es un relato denominado “Con el estómago raspado” el que nos lleva de lleno a la experiencia en el tema de formación médica, texto que cuenta con mucha información para reflexionar acerca de la docencia en medicina, qué es lo que ha cambiado y qué no. Posteriormente el autor nos presenta algunos relatos más de índole médico, donde se tratan temas tan variados al igual que álgidos como la muerte, la vejez, el quehacer médico y, por supuesto, no puede faltar el tema que golpeó al mundo de manera tan feroz, el COVID-19, tratado de una manera poco convencional si pensamos que lo escribe un médico, en activo, en medio de esta pandemia. La segunda parte, denominada “Relatos breves contundentes”, es una serie de aforismos, dignos de reflexión filosófica profunda, que podríamos llevar horas y horas analizando.
No se trata de un libro médico, ni necesariamente de relatos médicos, pero, sin duda, es un texto de narrativa médica que puede ser de gran utilidad para su análisis en la formación de los futuros médicos, con aquel hincapié que tanto se menciona en múltiples foros y publicaciones, el humanismo en el área de la salud, el cual aún no sabemos cómo fomentarlo. Se trata, además y quizá más valioso, de una invitación a atrevernos a escribir, cosa que, en el área de la medicina, desgraciadamente no es tan común.
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